Resaltar aquello más bello y disimular lo que menos nos gusta. Son algunas de las funciones que cumple el maquillaje, de esta manera conseguimos lucir más bellas y atractivas.
El maquillaje del día a día debe ser natural, ligero, muy fresco pero efectivo, todo lo contrario que el que nos apliquemos para la noche, que puede ser más intenso y con otro tipo de colores más fuertes.
Por eso, si quieres estar perfecta para una jornada de trabajo, no te puedes perder estos consejos sobre cómo ha de ser este tipo de maquillaje. Que prime la naturalidad, sin caer en brillos ni estridencias, para conseguir transmitir una imagen responsable, seria y atractiva.
Cómo maquillar los ojos
Comenzaremos con los ojos. La mirada de una persona dice mucho de ella, es su expresión y el reflejo de cómo se siente. Si quieres realzarla, nada mejor que maquillarte los ojos para que presenten un aspecto increíble, eso sí, evita para el maquillaje diario las sombras excesivamente oscuras y apuesta por tonalidades nudes o neutras, te verás mucho más natural y elegante.
Si te gusta delinear los ojos, trata de hacerlo con unos tonos no muy fuertes y hazlo sólo en el párpado superior o en el inferior, para que el resultado final sea más fresco y menos recargado. Si quieres un trazo más delicado y fino puedes usar un delineador en formato lápiz.
Finalmente, aplica una capa de rímel, un elemento de maquillaje indispensable y que nunca tiene que faltar en tus rutinas de belleza, para aportar mayor volumen a tus pestañas. Y si el tema de las sombras no te convence demasiado, tranquila, prescinde de ellas y quédate con el toque de máscara y un poco de delineado, que serán suficientes para lucir radiante en la oficina.
El rostro
Pasamos al rostro. En primer lugar, has de mantener la piel limpia e hidratada para que cualquier producto de maquillaje que apliques se fije de manera correcta y no aparezcan imperfecciones, grietas o sequedad. Ponte, antes de comenzar con el maquillaje, corrector de ojeras para camuflar los estragos del cansancio.
Para un aspecto natural para el día a día en la oficina puedes aplicarte una base líquida, siempre del tono más similar posible al tuyo propio de la piel. Las características de tu rostro marcarán el tipo de base que te irá mejor, también puedes optar por una BB Cream o maquillaje en polvo. El broche final lo pondremos con un toque de colorete y, en este caso, lo mismo, escoge un rubor discreto que te suba un poco el color pero de manera natural.
Dicen los expertos que el tono perfecto para el colorete es el que aparece en nuestras mejillas de manera natural cuando hemos hecho ejercicio o nos ruborizamos. Ése deberías aplicarte.
El maquillaje de los labios
Terminamos este repaso por el mejor maquillaje para el día con los labios. En este caso, nos ceñimos al mismo consejo anteriormente expuesto: ante todo, mucha naturalidad.
Por eso, los tonos nude y rosas serán muy acertados para ello, puedes darte un toque de gloss para que tus labios luzcan con volumen.
Errores que se deben evitar en el maquillaje
Si has seguido estos consejos probablemente tu aspecto será ideal para tu jornada de trabajo. Pero, por si acaso, vamos a enumerar algunos errores que debes evitar. Por un lado, no utilices una base oscura queriendo parecer que estás más bronceada. Siempre opta por aquella más similar al color natural de tu piel. Por otro, no te maquillajes con colores vibrantes ni demasiado llamativos, ni flúor, ni brillos. Estos quedan reservados para la noche.
